Conocer los objetivos y características de una buena visualización gráfica de datos. Identificar gráficos estándar. Clasificar gráficos de acuerdo con su uso.
Identificar problemas o anomalías. Identificar patrones o relaciones. Identificar tendencias. Estimar visualmente proporciones.
Nos permiten aprovechar el lenguaje visual como medio. Existen convenciones para lectura de gráficos en campos especializados. Por ejemplo, las pirámides poblacionales. En una presentación apoyan nuestra narrativa.
Es una forma de comunicación visual. Es una transformación parsimoniosa de datos en una escala numérica a una escala espacial. Generalmente no presenta de manera directa a los datos, sino algunas de sus propiedades. En este sentido es una representación de los datos. Podemos pensarlos como un modelo de los datos, no es la información completa sino una representación menos compleja que facilita su comprensión.
Un buen gráfico no necesita ser explicado, aquello que expresa es evidente. Un buen gráfico es una representación honesta de los datos. Por eso: Respeta a rajatablas las escalas. Siempre tiene etiquetas en los ejes. Que incluyen unidades de medida cuando es necesario. Y deja claro cuando se trata de conteos, cuando de proporciones y cuando de cambio proporcional. Prioriza la integridad de los datos sobre criterios estéticos. Facilita las comparaciones, pero no las induce. Siempre refiere a las fuentes de los datos. Muestra las series de tiempo en su longitud completa.
Un buen gráfico no sustituye a una tabla, la supera. Si un gráfico no es más inteligible que una tabla, ocupa más espacio o no es más claro para demostrar nuestro punto deberíamos usar la tabla. Innova, pero aprovecha las convenciones.
Un buen gráfico tiene una alto “data/ink ratio” o tasa de datos/tinta.2 Es decir, con un mínimo de tinta3 presenta la mayor cantidad posible de información. Cada elemento presente en el gráfico debe aportar información. Por lo tanto, toda información redundante debe ser removida. Eso incluye a los colores. Sólo los utilizamos cuando agregan una capa de información en sí mismos. Los datos tienen prioridad. Deben ser el centro de la atención. Siempre.
Los seres humanos percibimos mejor las diferencias de distancias en un plano. Nos resulta más difícil percibir variaciones en los ángulos. Por eso preferimos las coordenadas cartesianas. Y la perspectiva en dos dimensiones hace inconmensurables las escalas. Por eso no usamos gráficos en “3D”.